Nunca antes en la historia de la humanidad ha habido tanta diversidad de empresas y productos, ni tanta facilidad para exportar e importar objetos de todo tipo hasta los lugares más recónditos del planeta. Este hecho ha sido posible también gracias a la capacidad de las empresas de embalaje de dar soluciones a las muy diversas necesidades de la industria para el transporte de mercancías, tanto a través de los embalajes estándar, como de los embalajes especiales diseñados para permitir un transporte seguro de los productos con necesidades que se salen de la norma, ya sea debido a sus dimensiones, como a su delicadeza, peligrosidad, etc.
En este sentido, la diversidad de embalajes especiales es, por su propia naturaleza, casi ilimitado. No obstante, existen algunas características comunes que nos permiten clasificarlos en varios tipos, de entre los cuales veremos algunos de los más utilizados.
Quizá el ejemplo más claro de embalajes especiales sea el tipo de embalaje para mercancías peligrosas. Estos embalajes están necesariamente diseñados para asegurar el transporte y almacenamiento de todas aquellas mercancías como líquidos inflamables, materiales corrosivos, gases tóxicos, etc., capaces de dañar a las personas, al medio ambiente o a los bienes materiales de su entorno. Debido a que la seguridad en estos casos es especialmente importante, resulta imprescindible que sean embalajes homologados y debidamente etiquetados según las distintas normativas.
En cuanto a su composición, este tipo de embalajes está hecho de materiales muy diversos, siendo los más comunes diferentes tipos de plásticos y metales, y se clasifican en tres grupos según el nivel de peligrosidad de la carga que protegen.
Otro tipo de embalajes especiales son los denominados embalajes técnicos. Estos embalajes son principalmente utilizados para transportar y manipular productos especialmente delicados y de alto valor como equipos de telecomunicaciones, equipos audiovisuales, material médico, etc.
Suelen ser maletas y flight cases que, en su parte más externa, están hechas por completo de aluminio o de madera recubierta de PVC, pero con elementos metálicos como las bisagras o los refuerzos de las esquinas. La parte interior, suele estar compuesta por espumas o plásticos blandos que se adaptan a las piezas a transportar evitando su desplazamiento en el interior del embalaje.
Por otro lado, cuando la carga a transportar son productos ligeros, de estructura algo resistente, pero de superficies delicadas como, por ejemplo, tapicerías y piezas interiores de vehículos, es habitual utilizar embalajes especiales de cartón hechos a medida de la pieza a embalar. La posibilidad de crear estos embalajes a medida, permite la correcta fijación durante el transporte, así como durante la carga y descarga de la mercancía.
Este tipo de embalaje especial, combina la ligereza y el bajo coste del cartón, con la posibilidad de reforzar los puntos críticos de contacto con la pieza para dar robustez y especial protección a sus partes más delicadas, pudiéndose también combinar con otros embalajes exteriores más robustos de madera, plástico o metal.
En los casos en que los productos a transportar son objetos muy pesados y voluminosos, sin posibilidad de dividir por partes, como grandes estatuas o maquinaria pesada no desmontable, lo más habitual, es diseñar embalajes especiales de madera a medida.
En estos casos, también resulta muy importante llevar a cabo un buen trincaje de la mercancía que asegure la carga ante posibles desplazamientos durante el periodo de transporte y manipulación.
Finalmente, es preciso recordar que, tan importante es elegir los embalajes especiales adecuados a las necesidades de la mercancía a transportar, como la ejecución del transporte de dichas mercancías. En este sentido, siempre es recomendable contratar a empresas de embalaje y transporte de mercancías especiales que, como Embalex, cuenten con una amplia experiencia en estas dos tareas, de forma que puedan encargarse de todo el proceso de la manera más segura y eficiente, a través de un servicio de transporte propio.