Por ello, es interesante conocer el embalaje retráctil industrial y los beneficios que proporciona.
¿Qué es el embalaje retráctil Industrial?
La característica principal del embalaje retráctil es la de ser un material ignífugo, lo que significa que es resistente al calor y al fuego. Por ello, es usado en el sector de transporte de mercancías y su almacenaje, para proteger la carga.
Este tipo de material está compuesto de polietileno y goma adhesiva térmica, y se obtiene mediante el sellado con pistola térmica de plástico PET.
Debemos tener en cuenta, que cuando embalamos nuestra mercancía lo debemos hacer con un material flexible y resistente, y el plástico retráctil es ideal para esto.
El embalaje retráctil industrial es un material muy flexible y a la vez muy resistente.
Gracias a su particularidad permite ser utilizado en cualquier tipo de carga, ya sea angulosa, irregular, pues su capacidad de retractilado permite la adaptación a todo tipo de carga.
Beneficios del embalaje retráctil: ¿Por qué debemos incorporarlo en la protección de la carga?
Como hemos mencionado, este tipo de embalaje es resistente al fuego y al calor, además permite compactar la mercancía evitando que se mueva durante los procesos de transporte y manipulación de esta.
El poder compactar y proteger la mercancía es uno de los puntos que más debemos tener en cuenta, y el embalaje retráctil nos da este beneficio, protegiendo la carga de factores externos para impedir la corrosión de esta.
Debemos tener en cuenta que la carga se expone a muchos factores cuando viaja, ya sea por vía terrestre, aérea o marítima. Por ejemplo: Se expone a rayos UVA, lluvia, alta salinidad del agua, etc. en definitiva a factores que son altamente corrosivos. Por ello, el embalaje retráctil es ideal, ofreciendo grandes beneficios a nuestra carga:
- Alta resistencia
- Adaptable y flexible
- Protección UVA
- Protección ante lluvia
- Protección rasgaduras
- Protección suciedad
El uso de este tipo de embalaje es muy extenso, pues como hemos visto tiene grandes beneficios, no obstante, destaca su uso especialmente en:
- La exportación, sus características de compacto, resistencia y adaptabilidad hacen que su uso sea esencial, pues garantiza que la mercancía no padezca corrosión y llegue sana y salva a su destino.
- Almacenamiento de productos en el exterior, el plástico retráctil permite proteger la mercancía frente a todo tipo de agentes externos. Ofrece impermeabilidad, estabilidad térmica, protección contra rayos UVA, flexibilidad a la hora de mover la mercancía, entre otros beneficios.
- Paletización, su empleo es extendido en este tipo de prácticas, puesto que al ser embalaje retráctil permite la fijación y el compacto de la carga, consiguiendo que no se mueva ni se caiga en momentos de manipulación.
Algunos servicios que hemos ofrecido a nuestros clientes de Barcelona en cuanto al uso de embalaje retráctil industrial son:
Como vemos, el plástico retráctil destaca por su alta flexibilidad y resistencia, pudiendo retractilar la carga por muy irregular o angulosa que sea, por eso, el alto uso de embalaje retráctil en el sector industrial.
El plástico retráctil es un material flexible y muy resistente que permite el retractilado de la carga, ya sea irregular o angulosa, ofreciendo una protección y compacidad frente a las posibles perforaciones y rasgadas durante el transporte o el almacenaje de larga duración.
Proceso de embalaje retráctil industrial ¿Cómo lo hacemos?
- Paso 1: Preparación de la superficie. Ponemos especial énfasis en aplanar las zonas huecas y proteger los salientes de la mercancía para que no padezca daños.
Paso 2: Cubrimiento de la carga. Cubrimos toda la carga mediante plástico PET, consiguiendo que la superficie quede totalmente protegida.
- Paso 3: Termosellado. Una vez tengamos la superficie preparada y cubierta, aplicamos el retractilado mediante el sellado con pistolas térmicas de plástico PET.
- Paso 4: Colocación de malla y/o señalética. Para marcar zonas de enganche de la mercancía para su correcta manipulación.
Reciclaje de Embalaje retráctil industrial
En grupo Embalex somos conscientes que la sostenibilidad ambiental es algo vital para todos, por ello el plástico retráctil es un material que se recicla con facilidad, se comprime, corta y tritura. Una vez pasado este proceso, se lava y se vuelve a fundir, pudiendo transformarse en todo tipo de productos, además cumple la normativa ISO 22000.
En conclusión, el plástico retráctil es una de las opciones de embalaje más efectivas en el sector industrial, gracias a las características de protección que otorga a la mercancía: su cumplimiento de la normativa, su alta reciclabilidad y su bajo coste.